El aquí y el ahora

¿Por qué este título? Porque de esto se trata. Del aquí y del ahora. De vivir conscientes en momento presente. Cesar el diálogo interno constante con el que nuestro ego nos obsequia. Dicen, quienes entienden de ello, que vivimos un 95% de nuestro tiempo en piloto automático; que nos dejamos llevar por pensamientos que no controlamos, que aparecen desde nuestro subconsciente y les seguimos el juego. A veces nos da la sensación de que la vida nos pasa por delante sin tener conciencia de ella. Y más grave todavía: muchas veces no nos cuestionamos para nada todos estos patrones que nos han venido impuestos por la sociedad, las creencias limitantes que hemos ido integrando en nuestro inconsciente debido a mandatos de nuestros padres, abuelos, y demás antepasados; los hábitos y conductas que hemos adquirido en nuestros primeros años de vida; ellos son los que, sin que nos demos cuenta, gobiernan nuestra vida y nos juzgan y recriminan nuestra forma de ser. Cuando cometemos un error, en vez de pensar que éste muy bien puede ser una lección que debíamos aprender, solemos juzgarnos y apenarnos por ello. ¡Cuántas emociones nos han quedado ancladas y nos siguen doliendo día tras día! Dicen que el hombre es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra. ¿Y eso por qué? Porque nos es difícil, gracias a un ego muy “ególatra”, darnos cuenta de que nuestra mente subconsciente es la que nos rige el destino, y no nuestra mente consciente en el aquí y el ahora.


 Todo esto que estoy diciendo, que parece un tanto enmarañado y confuso explicado por mí, se entiende a la perfección en el vídeo que incrusto a continuación. Se trata de una entrevista realizada a Bruce H. Lipton hace ya algún tiempo, con motivo de la presentación de su segundo libro. En sus escritos, Lipton nos muestra que los genes y el ADN no son los únicos que controlan nuestra biología, sino que es el ambiente y los pensamientos positivos y negativos, los que hacen que estemos más o menos sanos. La intención de Lipton, con sus libros, es que una vez entendido su discurso, los lectores se den cuenta de que no existen los accidentes y que todos tenemos el poder de elegir nuestra experiencia de vida. Nos muestra la relación entre pensamientos, emociones y salud, invitándonos a asumir nuestra responsabilidad. Eso sí, con la ayuda de nuestra mente consciente en el aquí y el ahora.

Disfrutadlo.